Entre los muchos estereotipos que han circulado sobre Santiago Ramón y Cajal en vida del gran hombre y después, uno que es difícil encontrar es el de la inmodestia. El ilustre histólogo y creador de la teoría neuronal, premio Nobel en 1906, se consideraba un "obrero de la ciencia" y quizá juzgaría injustificado el monumental trabajo llevado a cabo por Juan Antonio Fernández Santarén para reunir su Epistolario, o lo que queda de él, que es una cuarta parte, según el autor.
http://www.elmundo.es/ciencia/2015/01/04/54a6c8fb268e3e5e2f8b458e.html
sábado, 10 de enero de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario